Decenas de miles de eventos tienen lugar en el mundo todos los días, fenómenos cuya ocurrencia no depende de la voluntad del hombre. Las ciencias jurídicas contienen disposiciones especiales sobre los acontecimientos y su función en la vida y las actividades humanas.
Un evento es un hecho legal que conduce al surgimiento de una relación legal. Los eventos pueden ser fenómenos naturales que ocurren en contra de la voluntad de una persona. En este caso, estamos hablando de inundaciones, terremotos y otros desastres naturales que ocurren sin culpa de las personas. Según la ley, una persona no puede ser sometida a ninguno de los tipos de responsabilidad legal si ha cometido un acto ilícito sin intención personal, pero bajo la influencia de factores externos. Por ejemplo, estas situaciones incluyen comer alimentos de una tienda en la que las personas han estado encerradas durante mucho tiempo debido a un terremoto en la ciudad.
Los eventos también son fenómenos naturales como el nacimiento o la muerte. Es imposible tomar medidas de aplicación de la ley contra una persona que ha muerto por su propia muerte. Así, si, por ejemplo, una persona fallece sin pagar un préstamo al banco, no se aplican sanciones, ni siquiera a su familia inmediata. El desenlace de esta situación se regulará de acuerdo con los términos del contrato que la persona celebró con la institución durante su vida.
Todos los tipos de legislación rusa, incluidos los civiles, penales, administrativos, laborales y otros, prevén el impacto de los eventos en las actividades de aplicación de la ley. Por lo tanto, para un tipo de evento específico, se brinda el resultado más favorable, en el que se vulnerarían los derechos y libertades de una persona como persona involucrada en una situación que escapa a su control.
Las leyes civiles, familiares y de otro tipo también prevén otras situaciones eventuales, por ejemplo, embarazo y parto, enfermedad, muerte de parientes cercanos y otros. Una persona que se encuentra en tales situaciones tiene derecho a dejar temporalmente su cargo y otras obligaciones por un período especificado por la ley, de modo que los eventos no interrumpan el curso natural de la aplicación de la ley.
Así, la característica principal de un evento es su carácter involuntario, y no estamos hablando de la causa que lo provocó, sino del proceso de impacto del evento en relaciones jurídicas específicas. Otro signo es temporal: cualquier evento tiene su comienzo y (la mayoría de las veces) final, en relación con el cual las situaciones de eventos se interpretan como modelos de interacción humana con condiciones naturales y naturales.