La primera vez en un nuevo trabajo se caracteriza por ser la más difícil, porque es necesario no solo realizar nuevas tareas, acostumbrarse a nuevas responsabilidades, sino también interactuar con un nuevo equipo que ha establecido normas de comunicación, conexiones y jerarquía.
Consejos de comportamiento para los primeros días laborables
No espere que el equipo desde el primer día muestre interés y participación en el recién llegado y lo acepte en su equipo. La mayoría de los colegas ya tienen un círculo social bien establecido, la aparición de una nueva persona a menudo introduce una parte de tensión en la comunicación. Se recomienda conocer al equipo de manera amistosa, por ejemplo, hacer una merienda con dulces a la hora de comer, tratar a los compañeros con tartas o pizzas en honor a reunirse o completar con éxito los primeros días laborables.
Es muy desaconsejado en las primeras horas de trabajo precipitarse en el meollo de los acontecimientos, imponer sus ideas y criticar los fundamentos del trabajo. Tal comportamiento alienará a los colegas potenciales, es necesario observar más de cerca el flujo diario de trabajo, las reglas tácitas, aclarar, si es necesario, con los colegas sobre las tradiciones internas, los requisitos de comportamiento y consultar con ellos sobre los principales problemas que surgen.. El cumplimiento de las normas establecidas en el equipo le permitirá completar con éxito el período de adaptación en el menor tiempo posible.
Las principales etapas de la adaptación.
En primer lugar, debe obtener la mayor cantidad de información posible sobre la estructura interna de una empresa u organización. Tales acciones mejorarán la orientación en el proceso de trabajo, permitirán evaluar el nivel de asistencia mutua y carga de trabajo del resto de empleados, su actividad y disposición a ayudar.
La siguiente etapa de adaptación en el trabajo es la etapa de negación. El equipo ya no parece amigable y receptivo, el trabajo es interesante, los problemas internos aumentan. Durante ese período, muchos recién llegados no pueden soportarlo y renuncian. Sin embargo, vale la pena esperar a que pase la tormenta de emociones que ha aparecido con un nivel decente de autocontrol, le seguirá una etapa de trabajo productivo.
La etapa de trabajo fructífero, cuando el empleado ha dominado nuevas responsabilidades, ha "arraigado" con éxito en el equipo, la dirección le encomienda tareas cada vez más complejas y responsables, es uno de los mejores períodos de su carrera. El empleado puede aportar el mayor beneficio posible a la organización y, al mismo tiempo, recibir satisfacción en el desempeño de sus funciones.
Por lo tanto, al ingresar a un nuevo trabajo y a un equipo desconocido, uno debe ser paciente, mostrarse como una persona abierta, amigable, paciente y comprensiva.