Una mujer embarazada no puede ser despedida por la reducción del número de empleados, que está directamente establecido por la legislación laboral vigente. Además, el despido injustificado de una mujer embarazada es un delito.
Los empleadores no suelen estar interesados en tener mujeres embarazadas en la plantilla de la organización, ya que estas últimas no aportan ningún beneficio económico, pero generan muchos problemas. Al mismo tiempo, la legislación laboral proporciona un mayor nivel de protección para estas mujeres, uno de cuyos componentes es la prohibición de su despido por iniciativa del empleador. La única excepción a esta regla es la liquidación de una empresa, la terminación de las actividades de un empresario individual, en la que se permite el despido de mujeres embarazadas. En cuanto a la reducción, una mujer embarazada no puede ser despedida, lo que se deriva directamente de las disposiciones del artículo 261 del Código del Trabajo de la Federación de Rusia.
¿Qué espera un empleador cuando despiden a una mujer embarazada?
En caso de despido ilegal de una mujer embarazada, ésta puede presentar un reclamo a las autoridades judiciales para su reincorporación laboral. En este caso, el requisito suele cumplirse, lo que conlleva costes adicionales para el empleador y otras consecuencias negativas. Además, incluso en ausencia de una apelación a las autoridades judiciales de la propia mujer, la violación cometida puede ser revelada durante una inspección por la oficina del fiscal, la inspección del trabajo. En este caso, también tendrá que reintegrar al empleado sobre la base de la prescripción correspondiente, e incurrir en una determinada penalización. Por lo tanto, se puede imponer una multa administrativa a una organización, ya que la violación es bastante grave y tiene consecuencias negativas muy específicas para una mujer embarazada.
¿Cuál es la amenaza para el jefe de despido injustificado de una mujer embarazada?
El administrador que permitió el despido injustificado de una mujer embarazada, incluida la rescisión del contrato de reducción, puede ser objeto de sanción penal, ya que este acto se considera un delito. La responsabilidad se establece en el artículo 145 del Código Penal de la Federación de Rusia. Las sanciones de este artículo implican la posibilidad de imponer una multa, cuyo monto puede ser de hasta 200.000 rublos, trabajo obligatorio, cuya duración puede ser de hasta trescientas sesenta horas. Es por ello que debe evitarse el despido injustificado de mujeres embarazadas, para cuya protección la legislación vigente establece medidas bastante estrictas, lo que se debe a la gran cantidad de infracciones que se permiten en relación a esta categoría de trabajadores.