Cualquier empleado puede presentar una solicitud de licencia por despido; en este caso, la base para la rescisión del contrato de trabajo no importa. Sin embargo, satisfacer esta solicitud es un derecho del empleador, no su obligación, por lo que la empresa puede rechazar al empleado.
El despido de un empleado de la organización suele sorprender al empleador. Por lo general, dicho empleado tiene una licencia no utilizada, por lo que, de acuerdo con la legislación laboral vigente, se debe pagar una compensación. La compensación especificada se emite junto con el pago completo al finalizar el contrato de trabajo, sin embargo, en algunos casos, el empleado desea utilizar todos los días de vacaciones restantes con el despido posterior. El significado de dicho uso es aumentar la duración del servicio, ya que el día de rescisión del contrato de trabajo en este caso será el último día de las vacaciones concedidas. Además, durante estas vacaciones, este ciudadano seguirá siendo considerado un empleado de la organización, retendrá todas las garantías previstas por la ley (por ejemplo, seguro social).
¿Está el empleador obligado a conceder una licencia en caso de despido?
La iniciativa de conceder la licencia con posterior despido debe provenir del propio trabajador, quien tiene derecho a dirigirse al empleador con la correspondiente declaración. Sin embargo, el Código del Trabajo de la Federación de Rusia dice que una organización puede otorgar dicha licencia sin mencionar la existencia de tal deber. En consecuencia, el empleador generalmente decide de forma independiente si satisface la solicitud del empleado para la provisión de descanso con despido posterior, ya que el registro de dicha licencia es un derecho de la organización y no su obligación. Si la empresa rechaza dicha licencia, esto no la exime de la obligación de pagar una compensación por todos los días de descanso anual no utilizados al empleado.
¿Cuándo se vuelve obligatoria la licencia seguida de despido?
El único caso en el que la concesión de una licencia con posterior despido se convierte en obligación del empleador es la rescisión del contrato de trabajo por acuerdo de las partes. Al mismo tiempo, el acuerdo especificado debe contener una condición especial que obligue a la organización a otorgar al empleado una licencia después del despido. La presencia de tal condición obliga a la empresa a satisfacer la solicitud presentada por el empleado, la negativa a emitir vacaciones puede ser apelada. Sin embargo, tales disputas entre empleadores y empleados son raras, ya que para la mayoría de los empleados no existe una diferencia fundamental entre recibir una compensación por las vacaciones no utilizadas y el pago de las vacaciones en sí.