La subordinación, que es importante no solo en la vida del ejército, sino también en las relaciones comerciales ordinarias, es un sistema de reglas que rige el comportamiento de los miembros del colectivo de trabajo, según el lugar que ocupe cada uno de ellos en la escala jerárquica. Entender la cadena de mando y seguirla es tan importante como conocer las reglas de etiqueta empresarial.
Definición del término "subordinación"
La subordinación es un sistema que regula la relación no solo entre el jefe y el subordinado, sino también entre el mayor y el menor, es decir, el puesto que ocupa.
La actitud del jefe subordinado fue formulada por Pedro I, quien emitió el 9 de diciembre de 1708 un decreto personal sobre la actitud ante las autoridades, donde formuló los requisitos para una persona subordinada: . Han pasado más de 300 años, pero todavía algunos líderes entienden la subordinación de esta manera.
Pero si un líder quiere lograr un trabajo realmente de alta calidad y altos resultados, la subordinación será el mecanismo que le permitirá lograr este objetivo. De hecho, de hecho, la subordinación es un sistema de relaciones comerciales claramente regulado que le permite lograr un trabajo bien coordinado de todo el equipo, unido por la implementación de una tarea común.
Mucha gente puede trabajar en esta tarea. Cada uno de ellos en su lugar de trabajo debe saber claramente con cuál de los otros empleados interactúa, con quién tiene derecho a preguntar y quién tiene derecho a preguntarle. Solo en este caso el equipo funcionará como un reloj bien engrasado.
La subordinación es un sistema de subordinación en el servicio, determinado por la medida de responsabilidad. El grado de responsabilidad suele estar determinado por el cargo que ocupa o los poderes asignados temporalmente.
¿Qué es una violación de la cadena de mando?
La subordinación se basa en las reglas establecidas de disciplina laboral, implica que todas las relaciones entre los empleados están sujetas a esta disciplina y están estrictamente en el marco del trabajo. Las acciones de cada empleado y, en consecuencia, su responsabilidad por ellas, están limitadas por el alcance de la descripción del trabajo, nadie tiene derecho a exigirle más.
Cada empleado tiene su propio supervisor directo, cuyas instrucciones debe cumplir. En caso de disconformidad con las acciones u órdenes de su gerencia, deberá apelarlas en el orden que establezca el reglamento de trabajo, sin violar la cadena de mando y sin actuar por encima de su cabeza. Lo mismo se aplica cuando tiene sugerencias para mejorar la calidad del trabajo y aumentar la productividad. El cumplimiento de la subordinación simplifica y facilita enormemente las relaciones en el equipo, excluyendo la posibilidad de incumplimiento de las decisiones de gestión.