En la época soviética, el equipo tomó la parte más directa en la vida de un empleado. Podría ser regañado en una reunión general por un delito menor; considere la declaración de familiares si se comportó de manera inmoral en el hogar; incluso podrían organizar algo como un espectáculo de prueba si entraba en un caos total. Después de eso, como regla general, el empleado fue despedido o corregido. Y todos se sintieron partícipes de los asuntos comunes: todo fue honesto y abierto.
Ahora no existe tal cosa, pero han aparecido nuevos conceptos, como "mobbing" y "jefes" - persecución de un empleado por el equipo o por el jefe. El propósito de estas acciones, a primera vista, parece primitivo: el que persigue, logra el despido del empleado. Sin embargo, no todo es tan sencillo, y si te has convertido en víctima de bullying, entonces es importante que comprendas con calma la situación para no caer en ella una y otra vez.
Considere desde afuera la situación cuando algunos se convierten en víctimas y otros en golpeadores. ¿Cuál es la razón de este conflicto? Puede haber varios de ellos:
- Si un empleado se destaca demasiado en el contexto general del equipo: cuando se busca a una persona culpable, la mirada del jefe, por regla general, cae sobre la primera persona que se encuentra, y si una mujer se ve brillante y original, entonces ella sin duda se convertirá en víctima de la acusación. El color de cabello demasiado brillante o inusual, los atuendos atrevidos o las joyas excesivas pueden ser la causa.
- El deseo de oponerse al equipo, especialmente la falta de voluntad para participar en asuntos comunes o preparación para un evento corporativo, participación en concursos. A los compañeros les duele que todos quieran participar en los eventos.
- Ser franco con los superiores o intentar tener una aventura con su jefe. A nadie le gustará.
- No se reconoce la autoridad del líder extraoficial del colectivo e intenta menospreciarlo. La opinión general en este caso se levantará en su contra.
- Falta de voluntad para asumir responsabilidades adicionales cuando todos las tienen.
- El comportamiento de una "víctima" típica: ganarse el favor de los colegas, falta de voluntad para responder a las críticas e incluso insultos abiertos. Esto provoca más acoso.
Desde el lado de los colegas, esto parece, por supuesto, antiestético, pero es muy útil para comprender las razones que motivan a las personas a participar en el acoso psicológico. Después de todo, comprender la situación es una garantía del 50% de que puedes salir como un ganador. Entonces, ¿qué impulsa al equipo a acosar a un empleado?
- Ansiedad porque hay alguien inusual cerca, no como todos los demás, con modales inusuales y miradas incomprensibles. Los colegas no quieren esforzarse y entender por qué una persona no es como ellos. Es más fácil eliminar este factor de irritación y vivir como de costumbre.
- Envidia elemental. Si el recién llegado ha alcanzado el éxito profesional, se ha ganado una buena actitud del jefe o ha logrado algo muy rápido, entonces bien puede surgir la envidia: el estereotipo de que cuanto más tiempo trabaja un empleado, más merecido es, sigue vivo, aunque no siempre es cierto.
- Un intento de defenderse profesionalmente (miedo a que se ponga en su lugar a un empleado más exitoso, aunque no lo solicites. Es un miedo inconsciente, por lo que es muy difícil lidiar con él).
- Solo ganas de divertirse. Al mismo tiempo, algunos creen que humillar a los colegas es muy divertido, mientras que otros, por así decirlo, se sienten “débiles”, ya sea que puedan soportarlo o no. En ambos casos, el comportamiento de los compañeros es indigno, pero no lo comprenden.
- Un intento de afirmarse a expensas de un colega, de confirmar la importancia de su trabajo y de él mismo personalmente. Esto, lamentablemente, no es infrecuente en nuestra vida.
- Encontrar una víctima en la que puedas romper el mal humor y en la que puedas sacar la decepción de tus fracasos, tanto personales como profesionales.
¿Cómo encontrar una salida a esta situación? Como regla general, comprender las razones del acoso o los mandatos ya proporciona elementos para la reflexión y sugiere formas de salir del conflicto. Aquí se puede aplicar un método muy eficaz de “no identificación”, cuando una persona se mira desde fuera: hay que imaginar que no eres tú, sino alguien más que ha sido perseguido en el equipo y darle consejos sobre cómo superarlo. esta. Es decir, no para identificarte con esta persona, sino para darle un consejo como forastero. En cualquier caso, vale la pena considerar que muy a menudo la causa del conflicto es un malentendido elemental.
Si esta técnica no ayuda, intente lo siguiente: considere las razones del acoso y trate de neutralizarlas:
- renunciar a una apariencia demasiado brillante;
- siga el discurso: a menudo sucede que los colegas perciben algunas declaraciones como inadecuadas;
- intente hacer amigos comprando un pastel e invitando a sus colegas a tomar el té en honor al primer salario o por otra razón;
- Hable con franqueza con el líder del equipo y dígale que sus intenciones hacia los colegas son las más benévolas y sinceras;
- pida ayuda a sus colegas en aquellos asuntos en los que no está muy familiarizado; esto aumentará su imagen ante sus propios ojos y se sentirán como sus patrocinadores, no como enemigos;
- asumir algún tipo de responsabilidad, como regar las flores o ventilar la habitación, es fácil, pero a menudo los colegas lo olvidan.
Si estos métodos no le convienen, puede intentar responder con fuerza a fuerza:
- sustituya a un colega presuntuoso o un jefe desequilibrado, para decir que comprende las razones de un comportamiento tan grosero;
- marque los límites de su espacio de trabajo y sus responsabilidades, para que no cuelguen demasiado y luego encuentren fallas;
- encuentra en ti mismo esos "ganchos" que los colegas hostiles pueden captar (lo que te ofende), y trata de eliminarlos;
- aprender las formas de lidiar con el estrés con la ayuda de la respiración, la meditación y otras técnicas; esto es necesario para calmarse rápidamente si no fue posible reaccionar con calma a algo, de lo contrario, la jornada laboral se arruinará;
- Entiende que si reaccionas a todo con calma (la calma debe estar adentro), muy pronto te dejarán atrás.
Si eso no ayuda, piense si necesita este trabajo. ¿Quizás será mucho más fácil encontrar otro, con un equipo más amigable? Luego comience a buscar otro trabajo y viva con tranquilidad, pero con una experiencia más rica de comunicarse con sus colegas.