Cada vez con mayor frecuencia, se designan a puestos directivos a jóvenes especialistas que no tienen experiencia en la interacción con el equipo desde el puesto de superior. Tienen que adquirir esta experiencia en la vida real y, a menudo, cometen errores típicos, que es muy posible evitar.
Antes de aceptar una posición de liderazgo, intente sopesar los pros y los contras de esta decisión. Responde a las preguntas:
- ¿Cuál es mi lugar en la empresa?
- ¿Cuáles son mis deseos internos?
- ¿Qué tan alto quiero ascender en la escala profesional?
- ¿Me ayudará una promoción a liberar mi potencial interior?
Entonces, respondiste las preguntas, decidiste convertirte en líder, ¿qué sigue? ¿Qué hacer y qué no hacer para no ensuciar tu nuevo puesto?
1. No es necesario hacer una revolución en el orden establecido en el equipo, porque cambios bruscos provocarán un fuerte rechazo, y en lugar del proceso creativo, puede comenzar un enfrentamiento entre el equipo y el líder. Si algo no te conviene en la organización del trabajo o en la política de personal, haz los cambios imperceptibles, graduales, paso a paso.
Se requerirán acciones completamente opuestas con los holgazanes que creen que nadie está mirando su trabajo. Una buena reorganización los hará trabajar duro o renunciar, lo que no siempre es malo para una organización.
2. No busque con demasiada frecuencia el consejo y el consejo de colegas superiores o superiores, especialmente en asuntos no esenciales. Tome decisiones por su cuenta: usted es el líder. Al mismo tiempo, no es superfluo seguir los consejos de los empleados experimentados, incluso si son de un rango inferior. En cualquier equipo hay personas que están apoyando la causa y siempre dan consejos constructivos. Encuentra a estas personas, pero no las conviertas en favoritas, a otras no les gustará. El líder debe ser el mismo para todos.
3. El celo excesivo y la adicción al trabajo no es un indicador de un buen líder, porque debería haber un medio dorado en todo. Eficiencia, objetividad, racionalidad, tranquilidad: esto es lo que su jefe espera del gerente promedio.
4. No intente adaptarse al equipo y complacer a todos ya todos, porque es simplemente imposible. Si ha tomado una decisión, sígala. Pero esto no significa que las decisiones no se puedan cambiar. Es solo que esto no debería suceder bajo la presión de una parte del equipo, sino según tu decisión. Siga la regla: determine cuál es el objetivo y cómo se puede lograr, esto ayudará a evaluar sobriamente la situación
5. Una vez más sobre los favoritos. A menudo, un líder joven trata de acercar al líder informal del equipo, para poder apoyarse a través de él si pasa algo. Las intrigas pueden comenzar aquí, las personas comenzarán a informarse entre sí, lo que conducirá a la recepción de información distorsionada. Recuerde que es posible que el equipo haya desarrollado relaciones hostiles persistentes que no siempre reflejan la realidad. Por lo tanto, mantenga una distancia normal con todos y simplemente organice el trabajo correctamente, entonces el resultado no tardará en llegar.