Sucede que la fatiga o el aburrimiento se acumula en el trabajo con tanta fuerza que se vuelve muy difícil luchar contra el sueño. Muévete, anímate y sigue trabajando y aportando valor a tu empresa.
Instrucciones
Paso 1
Duerma lo suficiente para evitar la necesidad de cerrar los ojos y quedarse dormido en el trabajo. Dormir bien todas las noches le dará fuerzas para trabajar durante el día. Duerma al menos ocho horas e intente acostarse antes de la medianoche. Observa la rutina diaria: vete a la cama y levántate siempre aproximadamente a la misma hora, incluso los fines de semana.
Paso 2
Tómese descansos durante su jornada laboral. Un poco de descanso es necesario para tu cuerpo, incluso si crees que tu trabajo no es agotador. Intente cenar fuera de su lugar de trabajo y realice caminatas cortas.
Paso 3
Cambia tu actividad. Es posible que se sienta abrumado por el sueño si ha estado haciendo un trabajo minucioso y repetitivo durante mucho tiempo. Intente tomar un descanso y hacer otra cosa.
Paso 4
No vale la pena trabajar en exceso y extender su jornada laboral de ocho a doce. En algún momento, su cuerpo se derrumbará y protestará. Si llega tarde al servicio casi todos los días, o no cumple con sus deberes, o la gerencia lo explota descaradamente. Ambos casos son motivo de preocupación.
Paso 5
Distraerse con algunas acciones simples. Ordene su lugar de trabajo, coloque documentos, riegue flores o simplemente mire por la ventana. Quizás su cuerpo cambie y comience a trabajar en un modo renovado.
Paso 6
Toma una taza de café aromático. Esta bebida tonificante permitirá que su cuerpo se despierte. Si no toma café o ya lo ha tomado por la mañana, reemplácelo con naranjas o jugo recién exprimido de estas frutas soleadas.
Paso 7
Piense en el próximo bono, calcule el porcentaje de su plan, piense en importantes trabajos pendientes o imagine a su jefe enojado que lo ve durmiendo en el trabajo. Quizás pensar en tu deber laboral y responsabilidades directas o no querer ser castigado te ayude a despertar.
Paso 8
Cambie un trabajo aburrido y sin esperanza por uno nuevo que sea interesante e inspirador. En la posición que más te guste, no querrás bostezar.