El gran número de divorcios registrados anualmente lleva a que los hijos permanezcan con el apoyo de la madre y los padres solo participen en su manutención y crianza. Lamentablemente, sucede que son ellos quienes pueden retirarse de la participación en la vida de sus hijos, y en este caso, una mujer puede acudir a los tribunales con una demanda, según la cual exigirá privar a su exmarido de la derechos a un niño.
Instrucciones
Paso 1
Las razones que pueden convertirse en la base para privar a uno de los padres del derecho a tener un hijo se enumeran en el art. 69 del Código de Familia de la Federación de Rusia. Estos incluyen: evasión de responsabilidades parentales, negativa a sacar al niño del hospital, abuso de los derechos de los padres, abuso infantil, alcoholismo crónico o adicción a las drogas, así como la comisión de un delito deliberado contra el niño o el segundo cónyuge.
Paso 2
Si existe al menos una de las razones enumeradas, vaya a la corte. Pero tenga en cuenta que este proceso requerirá argumentos fuertes y convincentes para probar que tales hechos ocurrieron. Deben estar documentados o corroborados por pruebas.
Paso 3
La forma más sencilla es reunir pruebas de que el padre del niño no le proporciona la asistencia material necesaria. Evitar sistemáticamente los pagos de pensión alimenticia puede convertirse en una prueba irrefutable del incumplimiento de sus responsabilidades parentales. Será más difícil probar la existencia de otras razones que puedan convertirse en una excusa para privar a un exmarido del derecho a tener un hijo.
Paso 4
En el caso de que sepa con certeza que el padre del niño está abusando del alcohol o es un adicto a las drogas, sus palabras no serán prueba suficiente. Proporcione pruebas que respalden este hecho. Lo mismo puede aplicarse a otras razones: abuso, abuso de los derechos de los padres, incluso comportamiento inmoral, todo lo que puede dañar la salud física y mental de un niño.
Paso 5
El tribunal también revisará cómo ha cambiado el comportamiento de su exmarido desde el divorcio, que fue el ímpetu de su decisión de revocar sus derechos de paternidad. El juez también querrá conocer la opinión del propio padre biológico. Si su reclamo es rechazado, no se desespere: en un año tiene derecho a volver a este tema y presentar un reclamo nuevamente.