Casi todos los redactores publicitarios en algún momento se enfrentan a este problema: una crisis creativa. No se puede confundir con la pereza, ¡no! Tengo ganas de escribir un buen artículo. Incluso hay una tarea, pero inspiración, no … En esos momentos parece que nunca lo será. ¿Qué hacer en esos momentos?
La crisis creativa a menudo no es visitada por recién llegados, sino por un veterano. También es difícil para el primero comenzar a escribir, pero esta es una incertidumbre natural antes de comenzar un nuevo negocio, se supera fácilmente. El primer éxito, el primero obtenido, aunque sea la cantidad más pequeña, da fuerza y fe en uno mismo. Y luego, cuando se gana la calificación y la reputación, cuando hay clientes habituales, cuando el algoritmo de trabajo ya se ha encontrado, llega ese momento: ¡no está escrito! ¿Qué hacer con este estupor?
En primer lugar, no se desespere. "He escrito, estoy agotado, nunca volveré a tener éxito" … Estos pensamientos vienen, pero déjalos ir de la misma manera. Una persona no puede agotar sus capacidades escribiendo una docena o un centenar de artículos. Esto es fatiga, exceso de trabajo, que es bastante natural. Como lidiar con esto? Relájate, por supuesto. Pero no es fácil quedarse mirando al techo, hojeando algunas frases nuevas en tu cabeza y, más aún, no sentarte frente a la computadora.
Tomar un día de descanso. No se inventaron en vano, y uno o dos días no estropearán las relaciones con los clientes, pero influirán en la calidad del trabajo de forma beneficiosa. Al igual que al comienzo del trabajo, un redactor publicitario asume precipitadamente la obligación: "¡Ni un día sin un artículo!" Bueno, no debes olvidarte de la jornada laboral de ocho horas, si no quieres acelerar el inicio de la notoria crisis creativa.
Caminar al aire libre es necesario, es útil en todos los aspectos. ¡Pero también se necesitan nuevas impresiones! Deje que su caminata sea decidida: camine a la biblioteca, a la librería. Mire los últimos lanzamientos de varias editoriales, hojee, lea algunas de las frases. Nunca se sabe qué frase inesperada se hundirá en el alma y dará ideas para un nuevo trabajo. Es imperativo que la persona que escribe lea, esto desarrolla el pensamiento y enriquece el vocabulario.
Con el mismo propósito, no será superfluo comunicarse con la gente, ir al teatro o al cine, ver películas interesantes en casa. Pero incluso durante el trabajo, uno no debe olvidarse de la necesidad de "cambiar".
Todos recuerdan desde la infancia que el mejor descanso es un cambio de actividad. ¿Qué tipo de cambio puede tener un redactor publicitario? La misma computadora, el mismo teclado … ¡Necesito cambiar el tema!
Si una persona escribe día tras día sobre, digamos, cocina, entonces no es de extrañar que al final comience a repetirse, a expresarse en clichés. Después de varios meses e incluso semanas de escribir exclusivamente recetas, le resultará muy difícil pasar a cualquier otro tema, más liviano y familiar, pero en la cocina ya no podrá escribir tan interesante y original. Por supuesto, nadie puede estar bien versado en todos los temas, pero es necesario tener al menos 3-5 en “suyo”, cambiándolos regularmente.
Siguiendo estos sencillos consejos, no será difícil vencer la notoria crisis creativa y prevenir su aparición. Durante el fin de semana, extrañe un poco su trabajo, mientras escribe artículos sobre el tema de la renovación, anhela su cocina favorita, etc. ¡Y con renovado vigor, emprende tu trabajo favorito!