Una dieta inadecuada durante la jornada laboral puede afectar su salud con el tiempo. Si hay una buena cafetería corporativa cerca, el problema se puede resolver muy fácilmente. Sin embargo, la mayoría de los trabajos están ubicados de tal manera que debe buscar otras formas de salir de la situación.
Comida para llevar
Traer comida de casa es problemático. Lo que vas a comer durante la jornada laboral se debe preparar con anticipación, poner en recipientes, y luego cuidar que la comida no se eche a perder. Un refrigerador en el trabajo o una bolsa térmica pueden ayudar. No todo el mundo estará de acuerdo con estos métodos, ya que en realidad requiere mucho tiempo y esfuerzo. Además, no todas las empresas tienen lugares donde poder comer. Si come directamente en su escritorio, es probable que el olor de su comida llene la habitación y pueda irritar a sus colegas.
A pesar de todas las dificultades, es este método de nutrición el que se puede catalogar como uno de los más saludables y económicos. En primer lugar, podrá controlar completamente la calidad de los alimentos que consume. Si sigue los principios de una dieta saludable, este método le permitirá comer solo alimentos de calidad con la frecuencia correcta (después de 3-4 horas). Podrá no comer en exceso, comer de forma fraccionada y en pequeñas porciones y, por lo tanto, asegurarse contra muchas enfermedades, desde la diabetes hasta la gastritis.
Trate de traer alimentos que también pueda comer fríos (por ejemplo, ensalada con verduras y pechuga de pollo, sándwiches hechos con pan integral, tortillas con aderezos). Además de la comida principal, tome un refrigerio: frutas, nueces, yogures.
Órdenes colectivas
Si no tiene una cantina cerca en el trabajo, puede organizar fácilmente la entrega de comida preparada. La opción más fácil pero cara es comer en restaurantes. Suele haber muchas ofertas disponibles: para todos los gustos y presupuestos. Si forma equipo con compañeros, podrá probar diferentes platos todos los días y recibir importantes descuentos en el volumen de pedidos. Por regla general, durante el día, muchos establecimientos de restauración ofrecen todo tipo de menús fijos y almuerzos de empresa a precios reducidos.
Si ordenar en restaurantes es costoso para usted, o la calidad de dicha comida no se adapta al equipo, busque una persona que entregue comidas calientes a las oficinas de manera privada. Es mejor si es un chef casero probado. Por lo general, podrá acordar el menú con varios días de anticipación. La elección de platos de "comerciantes privados", por supuesto, no es tan grande como en los restaurantes. Sin embargo, obtienes deliciosa comida casera a precios razonables.
A menudo, la situación se desarrolla de tal manera que los pedidos combinados pueden no ser adecuados para algunos de los miembros del equipo, o no podrá ponerse de acuerdo con sus colegas sobre esta forma de catering. En este caso, deténgase en lo mínimo: compre un horno microondas, una cafetera, una tetera para su oficina. Recauda dinero de vez en cuando para agua, café, té, azúcar, ya que algunas personas generalmente solo se conforman con bebidas durante la jornada laboral. Compre el resto de la comida de forma individual u organice en grupos de 2-3 personas.